Este es un hombre que se esta muriendo y la esposa está al lado de él. "Amor" dice él, "tengo que confesarte algo, algo que no puedo llevar a la tumba sin decírtelo". La esposa le dice que no se preocupe, que lo tome con calma. El insiste y la esposa le dice que esta bien. "Amor, yo te pegue tarros con tu mejor amiga, con tu hermana y hasta con tu madre." "Yo se", dice la esposa, "por eso es que te envenene!

Se acusa a una señora por el asesinato de su marido, entonces el juez le pregunta: ¿Por qué lo mató?
Ella responde: Yo no lo maté, le voy a contar lo que pasó. Yo estaba lavando cuando el va y me empieza a tirar agua, y me dice: ¡Cómo que te llueve!, yo no dije nada. Luego me tira piedras y me dice: ¡Cómo que te graniza!, yo tampoco respondí nada. Después el cogió un látigo y me empezó a dar, y me dice: ¡Cómo que te relampaguea!. Entonces ya me dio rabia, cogí un machete y le di un solo golpe diciéndole: Como que te parte un rayo.

Había una señora que estaba desesperada ya que su marido no podía erectar, conversando con su vecina, esta le comenta que tiene un polvito blanco que podía hacer que a su marido se le levante el aparato y que este crezca más aun, la señora ni corta ni perezosa le pide un poco de ese polvito blanco, entonces le prepara a su marido unos tallarines (fideos) y le echa el polvito blanco como si fuese queso parmesano, rayado.
Cuando de repente el marido siente que el aparato se levanta, le dice: ¡Mujer ve a la cama y prepárate que ahorita te destrozo! La mujer corre al cuarto, se desnuda y se echa en la cama, llega el marido hace lo mismo y se lanza contra la mujer, están haciendo el amor de una manera desenfrenada, de todas las formas imaginables, en un momento que ella estaba sentada encima de él, comenzó a crecerle el miembro y comenzó a levantarla de tal forma que ya llegaba al techo, cuando esto sucedía, la señora gritaba al criado de la casa, Jaime, Jaime trae el hacha, trae el hacha, de pronto Jaime entra al cuarto de sus patrones y ve la escena y dice: ¿Dónde corto señora?¿Dónde corto?, Ella responde: ¡Dónde corto!, Imbécil, rompe el techo, rompe el techo.

Una noche, una pareja de recién casados tuvo relaciones y la mujer desesperada le decía a su esposo: ¿Qué nombre le vamos a poner al niño, ¿qué nombre le vamos a poner al niño? El marido se agarró la verga, se quitó el condón y le dijo a su esposa: Mira si sale de aquí le vamos a poner Copperfield.